El tratamiento de aguas residuales domésticas es un tipo de tratamiento de aguas residuales que tiene como objetivo eliminar los contaminantes de las alcantarillas para producir un desecho adecuado para su descarga en el medio ambiente circundante o para una aplicación de reutilización prevista, evitando así la contaminación del agua por los desechos sin tratar. El tratamiento de aguas residuales domésticas generalmente incluye dos etapas principales denominadas tratamiento primario y secundario, aunque puede incluir un tratamiento adicional y la eliminación de nutrientes con una etapa de tratamiento terciario.
En la selección del proceso, se toman en cuenta los desarrollos tecnológicos, el sitio y las condiciones de operación, el carácter de las aguas residuales, los límites de calidad, los requisitos del operador, las preferencias del cliente, la inversión y los costos de operación.